17 mar 2010

¿Los videojuegos han llegado para suplantar una manera de jugar?

El avance de la tecnología plantea una nueva forma de jugar, que puede ayudar en el proceso de enseñanza aprendizaje, pero qué sucede entonces con la antigua manera de jugar.

En esta nueva era de la tecnología y las comunicaciones los videojuegos han llegado para quedarse debido a que cualquier niño tiene acceso a ellos y puede jugar tranquilamente desde su casa. Por eso mismo, se ha instalado el debate acerca del valor agregado que pueden aportar y se han realizado estudios sobre cómo pueden ayudar en el proceso de enseñanza y aprendizaje que se genera en el ámbito escolar.

Dentro de los beneficios de los juegos electrónicos se encuentra la capacidad de poder desarrollar y estimular la imaginación y la creatividad del niño, como así también, la posibilidad de anticiparse a diversas situaciones y la facilidad para resolver determinados problemas.

Sin embargo, cuando el pequeño está frente a una pantalla, está "solo” y quieto. Por lo tanto, es correcto afirmar que este tipo de juegos impide el proceso de sociabilización con el resto, tan importante para forjar su personalidad, y fomenta hábitos sedentarios, impidiendo el desarrollo de capacidades motrices básicas.

No obstante, el avance de la tecnología es inminente y, por eso mismo, no se puede estar ajeno a la evolución. Si los niños juegan en su casa, si han suplantado la pelota por la pantalla, se debería tomar lo positivo de esta conducta para brindar nuevas herramientas en beneficio de la educación.
De todos modos, no se puede estar fuera de la realidad educativa actual, en el sentido de que no todas las escuelas cuentan con computadoras y que, a la hora de adquirirlas las prioridades suelen ser otras como, por ejemplo, el comedor escolar.

Los docentes creen que la enseñanza mediante videojuegos en el país es algo utópico, teniendo en cuenta la carencia que hay a nivel educativo. “Además de los múltiples beneficios que ofrece pelota, uno de los más atractivos, al menos para la realidad educativa del país, es que es barata”, asegura una maestra de nivel primario.

El desafío estaría en generar las herramientas, dentro de las posibilidades concretas, para que tanto la pelota, como los videojuegos, puedan brindar los instrumentos necesarios para reforzar y enriquecer el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Victoria Moroni - (victoriamoronik@hotmail.com)
 

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